<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d6273027\x26blogName\x3dNeomierda.\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLACK\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://neocrap.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des_MX\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://neocrap.blogspot.com/\x26vt\x3d-2210284163126322865', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>

Neomierda.

Cero credibilidad.

Una de Amors

Durante los últimos dias o semanas, me he encontrado en situaciones y pláticas que siempre me llevan al mismo lugar, siempre al mismo tema: el amor.

La verdad, creo que tengo una idea de lo que es eso que llamamos amor. Y creo también que hay muchas clases de amor, esto, obviamente, no es nada del otro mundo, y creo que todos sabemos que existen distintos tipos de amor ¿no? el amor a tus padres, el amor a tus hermanos, el amor a tus compas (porque sí se puede amar a los compas, aunque suene gay), el amor de pareja (en todas sus denominaciones) el amor a una causa o sentimiento (snif), el amor platónico, el amor a primera vista, el amor apache, el amor chilango, el amor en los tiempos del cólera, el amor al trabajo, a la poesía, o a un equipo de fútbol.

Hay tantos tipos de amor como personas en el mundo y arena en el mar. Y aún así todos son bien cabrones: son igual de intensos, de bellos, de malagradecidos, de terribles; cuentan con la capacidad de hacerte sentir un dios, asi como puede provocar que te quieras aplicar el harakiri cuando no salen las cosas. Todos tienen su chiste, su manera de joderte o elevarte.

Como diría Forrest Gump: "Yo no se mucho de muchas cosas, pero se lo que es el amor". Yo mismo, pienso, puedo decir lo mismo, puesto que he experimentado el amor y he visto a gente cercana a mi sentirlo. Los he visto florecer y marchitarse ante mis ojos, he mirado de cerca las consecuencias negativas y autodestructivas que conlleva y también he sido testigo de la parte positiva y gratificante que traen sus efectos.

Sin embargo, todavía no me siento en condiciones de emitir un juicio al respecto. Hablo, por supuesto, de la clase de amor que ha sido la inspiración de tantas odas, cantos y loas de numerosos artistas, músicos (profesionales y de congal), escritores, poetas, etcetera etcetera: el amor de pareja. Si. Ese mero.

Al menos en mi caso, en lo que a mi respecta, cuando me sucedió, sentí todo lo que se supone siente uno, a ver si no estoy mal: Primero, sensaciónes corpóreas, ya saben: calor en el estómago, sonrisita pendeja, tendencia a hablar más idioteces de la cuenta, sonrisa estúpida permanente, y ese sentimiento gratificante en la espalda que te da cuando la persona amada te toca, accidentalmente o no.

Después viene el bloqueo visual: no hay nadie más para tí. Nadie. Solamente el ser amado. Que, ya de pasada, puede presentarse ante tí con un atuendo consistente en una bolsa de basura que le cubra el cuerpo y unas hojas de periódico que abriguen sus pies, el cabello alborotado, sin bañarse y apestando a burro de deshebrada o a caldo de res, y ser lo más bello que hayas visto jamás. Su risa es lo más bello que has escuchado jamás, cada palabra articulada por su boca es una sinfonía para tus oídos, su cabello es... ah... y sus ojos son tan... oh... y su aliento es perfume, ja. Pura euforia chingona.

Pasada la etapa de la euforia, viene la evolución: comienzas a desear el bienestar del otro, su bien, su felicidad, estás dispuesto a romperte la espalda, a patear culos y matar a quien sea necesario todo con el fin de que la persona que amas, simplemente sonría, o te mire como sólo ella/el sabe.

¿Creo que es más o menos así no? Bueno, al menos a mi así me pasó. Luego degeneró en obsesion mal pedo... but that's beside the point.

Escribo todo esto, porque últimamente, he escuchado como personas ya no creen en el amor de pareja, y no lo quieren buscar más; como otras personas evalúan si lo que sienten es verdaderamente amo, o simplemente costumbre; como otras personas se libran de ese sentimiento con sorprendente facilidad y se montan de nuevo en el caballo, "porque la mejor forma de cabalgar después de caerte, es montar de nuevo de inmediato"; y también como otras, no lo sienten y no lo buscan; otros que lo encuentran, ahi lo tienen, y ni cuenta se dan; otros que se cierran a tan chingona posibilidad por miedo o por - válgame Dios - hueva; y otros que simplemente, les vale puritita verga: si pasa, chido, si no, también. Te tocó, te tocó.

Como ya dije antes: no puedo hablar bien sobre el tema, y de hecho, no se porque escribo sobre él; ya que en realidad, no me ha tocado sentir el amor con su efecto total, de ida y vuelta. Ese huracán que hace de Wilma y Katrina lo más parecido a ir caminar al parque. Pero estoy conciente de lo que sentí. Es lindo.

Si, creo que el amor es muy lindo. Pero lo que tiene de lindo, lo tiene de maldito. Porque muchas veces, como todo, sale mal. Y hay arrepentimientos, sollozos, mentadas, pedas y sus numerosas consecuencias. Pero bueno, también tiene que suceder, digo, si no hubiera desamor ¿de que hubiera hecho su fortuna Jose Alfredo, y que cosas cantaría Chente Fernandez, y de donde hubiera sacado su inspiración Shakira para hacer sus rolas cabronas cuando tenia pelo negro? Esque tambien tiene que tener su lado malo: tiene que haber azotes, gritos, rasgadura de vestiduras (¡como Job!), reclamos, mentadas y muchas, muchísimas lágrimas que se curan con pan, pisto, o ya más pesado el asunto, con un acostón.

Y a veces la gente, cuando todo termina mal, se pregunta que hizo mal, que ha hecho para merecer esto, porque me dejó si todo iba tan bien, esque porque no me quiere, esque eramos el uno para el otro, todo era pefecto, todo estaba en orden, porque me puso el cuerno, porque me dejo de amar, y tantas preguntas que mucho, mucho tiempo después tendrán respuesta. Me incluyo. Por desgracia, hay algunas personas que a raíz de esto se amargan o se cierran, y otras, aprenden de lo que las pasó, mientras algunas más simplemente les parece muy cansado y les da hueva volverlo a buscar.

Y ahí esta el asunto: volverlo a buscar. Porque aunque nos hagamos pendejos, y lo neguemos, siempre, siempre, lo volvemos a buscar. Es regresar a lo mismo, pero distinto cada vez, es lo nuevo de lo ya visto, es como ver la misma película pero encontrándole cosas nuevas e interesantes. No sé, la cosa esta que el que te niegue que no esta buscando tener alguien a su lado o enamorarse, te esta mintiendo, o se está mintiendo. Una cosa esque no lo busques y otra muy distinta, que no lo desées.

A veces sale bien todo, a veces sale mal todo. Y de todas formas, siempre volvemos a lo mismo. Siempre nos levantamos para volver a lo mismo. Cosa que me parece excelente: no se puede vivir sin tener algo por que luchar, o algo a lo cual aspirar... siento que es medio vacío vivir simplemente por que te levantas en las mañanas, caminar porque tienes concreto enfrente, respirar por que no tienes enfisema, y comer porque te da hambre... pero me desvío. A lo que voy esque el amor tiene esa capacidad extraordinaria de dejarnos queriendo más siempre. De dejarnos con las ganas, de recordar lo que sentimos y no mames, quererlo de vuelta, de sentir melancolía tan cabrona que nos obliga a buscarlo de nuevo, en otros brazos, en otros labios, en otros ojos o en los mismos que ya conocemos y que abandonamos por no saber, por no querer, o por franca pendejez.

Como sea, me he extendido mucho. Simplemente queria escribir esta pendejada a raíz de que leí algo y se me vino a la mente toda esta avalancha de conceptos, lugares comunes y clichés mamones.

No nos hagamos pendejos: El amor es bonito. Y ya. Punto. Puto el que diga lo contrario.
« Home | Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »